sábado, 30 de junio de 2012

Un voto contra el miedo, contra la ficción, por un futuro diferente…



"Hasta que no tengan conciencia de su fuerza, no se rebelarán,
y hasta después de haberse rebelado, no serán conscientes"

G. Orwell “1984”



Hace algunos años leí un libro de ciencia ficción que me pareció excelente, hablo del libro titulado 1984 de George Orwell, publicado en 1949[1].Dicha obra, plantea una sociedad vigilada por el ojo –debiera decir los ojos- del “Gran Hermano”, una sociedad vigilada por cámaras y micrófonos instalados en prácticamente todos los puntos de la ciudad, un Estado que ha conseguido el control total sobre el individuo, que ha anulado su posibilidad de acción, de desacuerdo, y ya no digamos, la posibilidad de protesta o exigencia.

El panorama planteado por G. Orwell es desolador. La ciencia ficción con frecuencia hace evidente nuestra degeneración como especie. Resalta de una forma metafórica nuestras decadentes realidades o panoramas. Me gustaría creer que esto es imposible, pero tal vez ni Orwell con 1984, ni Aldous Huxley con Brave New World[2] estaban totalmente equivocados con sus desalentadores textos. Uno planteando una sociedad estrictamente vigilada, sin libertad; y el segundo, exponiendo una realidad en donde la vida se cultiva, se controla y se predestina, en donde no existe la libertad de escoger el futuro a partir de opciones sino de “conformarse alegremente” con el único que se tiene.

Me gusta leer este tipo de textos porque sin duda a la vez que sumergen al lector en mundos “aparentemente distantes” provocan suponer alternativas para no llegar a panoramas reales tan nublados.
Desde mi punto de vista creo que la sociedad ahora NO está condenada a ser vigilada únicamente, sino que, tiene la posibilidad de vigilar y registrar su realidad como una evidencia en su defensa. Las recientes marchas y manifestaciones que se han presentado en México surgieron a partir de este registro de hechos, los medios masivos dejaron de ser la única voz que informa[3], la prensa impresa dejó de ser leída hasta el medio día, y la radio no se limita más a la AM y FM; ahora los medios digitales hacen posible consultar fuentes, instituciones, gráficas, notas, declaraciones, videos, imágenes y audios  al mismo tiempo que se lee un artículo.

En otras palabras, el ciudadano, comienza a elaborar sus propias informaciones y éstas al final, más como obligación que como deseo, terminan siendo citadas por los medios masivos, es entonces que son dadas a conocer a aquella población que tiene a la TV como único medio de información. Sin embargo, esto no basta.

En una sociedad como la mexicana en la que, en promedio, las amas de casa y los niños están expuestos a la televisión entre 6 y 8 horas diarias, la presencia de un político en este medio se torna relevante. Hay lugares en México, en los que la TV se enciende desde que la primera persona de la familia se levanta y se apaga justo antes de irse a dormir.

Eso explica porqué alguien con tan escasa trayectoria como Enrique Peña es hoy candidato a la presidencia, no sólo esto, además el partido que lo postula es el semillero de personalidades que cometieron aberraciones tan grandes en la Historia de México como la matanza de los estudiantes en Tlatelolco en 1968, sólo a 10 días de que las olimpiadas se celebraran[4]; el fraude electoral de 1988 y la quema de esas actas para declarar a Carlos Salinas de Gortari presidente de México ante el descontento e inconformidad de los mexicanos; la venta o regalo de muchas de las empresas del Estado como: bancos, TELMEX (el mismo que produjo al hombre más rico del mundo) y medios como IMEVISION, después TV Azteca; más tarde, la sospecha en asesinatos como los de Colosio y Ruíz Massieu; la represión a las comunidades zapatistas, las matanzas de Acteal[5] y Aguas Blancas[6]; y las descaradas compras de votos en este 2012, por no hablar de los artículos publicados por el periódico británico The Guardian[7] y la revista Proceso sobre un contrato por debajo del agua de Peña con Televisa para llevarlo a la presidencia, nexos de sus gobernadores con el narco,  más un interminable etcétera que sólo hace evidente las mismas prácticas de un partido corrupto, autoritario y retrógrada.

Ese mismo aparato que penetra en millones de hogares, casi omnipresente en México, fue el que llevó en 2000 a un charro con botas a la presidencia. Muchos creímos la puesta en escena, y después de 12 años de un partido distinto al PRI en el poder (el PAN), las cosas no cambiaron mucho. La pobreza y la desigualdad en México siguió aumentando, los changarritos de Fox no fueron suficientes pues se quedaron en el discurso o en la informalidad, las prácticas de compadrazgo y corrupción continuaron -y prueba de ello es la demanda que enfrenta actualmente Manuel Bribiesca Sahagún en EE UU[8]-, la impunidad del Pemexgate, y recientemente, la invitación de Fox a votar por el PRI, algo absolutamente irónico y risible.

Calderón llegó a la presidencia ante un proceso altamente cuestionado, pero aún así, después de 6 años, se olvido de su promesa de ser el presidente del empleo y se lanzó a una guerra absurda que ha dejado más de 65 000 muertos... Surgen pues, preguntas necesarias: ¿Cómo querer ganar una guerra contra el narco cuando te olvidas de la educación, la salud, el deporte y la cultura como ejes esenciales para que esa estrategia tenga éxito en los jóvenes, principales víctimas de ese “mercado”? ¿Se puede presumir de una estabilidad económica cuando la estabilidad social, laboral y de seguridad es tan precaria y nos tienen sumidos en un ambiente de indefensión? ¿Se puede ganar una guerra con una inteligencia tan ineficaz que raya en el ridículo con la presunta aprehensión del hijo del chapo,  noticia con eco internacional que horas más tarde fue aceptada como incorrecta?

Así pues, llegamos a la tercera opción que tendremos en las urnas, el proyecto de las izquierdas. Ciertamente no son ningunos santos, sin embargo hay algunos elementos que me hacen inclinarme hacia acá:

1) En absolutamente todos los simulacros electorales en las universidades a lo largo de todo el país, estudiantes, trabajadores, profesores e investigadores votaron en apoyo al proyecto de AMLO, resultando éste siempre ganador en dichos simulacros. En universidades privadas como el TEC de Monterrey y la Ibero, Andrés Manuel fue recibido de una manera totalmente inesperada, llegando incluso a ovacionarlo.

2) Fue el único proyecto que hizo pública una propuesta de gabinete, lo cual implica desde mi perspectiva, hacer evidente la participación de personalidades que no están en partido político alguno, sino que más bien han demostrado trayectorias ejemplares y un alto grado de capacidad en las áreas que se desempeñan. Deja claro que no estarán ahí por compadrazgos o favores, sino para desempeñar puestos como lo han hecho antes, con ética, responsabilidad y profesionalismo. René Drucker y Juan Ramón de la Fuente en el sector de la ciencia y la educación me dejan tranquilo, José Agustín Ortíz Pinchetti en la Secretaría de trabajo y Marcelo Ebrard en Gobernación me parecen a la altura de sus cargos. Aquí el gabinete completo: [9] La más reciente propuesta deManuel Clouthier como contralor anticorrupción en su gabinete comprueban este punto.[10]

3) Puso en su discurso conceptos y valores que no son ni equívocamente pronunciados por los políticos: Honestidad, Amor, Ética, Compromiso y Coherencia, ya no digamos practicados.[11]

4) Este proyecto, si bien aparecerá representado en la boleta electoral por el PRD, PT o Movimiento Ciudadano, NO se reduce a los simpatizantes de esos partidos, sino a muchos ciudadanos que no pertenecemos a ningún partido político, pero que hemos visto en MORENA una organización ciudadana real y que, creemos necesario salir a votar el día 1 de julio para impedir el regreso del PRI y lo que ello significa.

Invito a salir de casa, a sacudirnos los miedos y los tabúes, a intentar una opción diferente porque las otras dos simple y sencillamente han tenido su oportunidad y no lo han hecho nada bien. Si escogemos las mismas opciones tendremos los mismos resultados que no nos han llevado a ningún lado, si nos quitamos los miedos que nos han intentado hacer creer, tal vez con eso y con la colaboración de cada uno de nosotros en sus trabajos, en sus escuelas y en actividades sociales, ayudaremos a que nuestro país deje de ser propenso a vender su futuro sexenal por una despensa de 500 pesos, -sea del partido que sea-.
 Veamos mucho más allá, en un futuro más justo, más seguro, más educado, más equitativo, veamos ese futuro que los medios quieren evitar que miremos, veamos un futro real y cuestionemos la “realidad” que nos han intentado hacer creer los medios a través de sus noticiero ficción. Vayamos con nuestros vecinos, familia y amigos a votar y cuidar el voto de México.[12]










[4] “Tlatelolco, las claves de la masacre” http://www.youtube.com/watch?v=SHB_6A0tZHQ
[12] Sitios en donde puedes denunciar y subir las fotos de tu casilla con la sabana de los resultados finales: www.fotoxcasilla.mx // www.observacionciudadana.org // www.conteociudadano.org // www.contamos.org.mx //  www.urnaabierta.org.mx // http://yosoyantifraude.org // http://prepciudadano.mx/